Historia de Metalío

La Tiendona
Tierra en la cueva donde abunda el Maguey
Metalío, que significa "Tierra en la cueva donde abunda el Maguey" en náhuatl, tiene una historia relacionada con la abundancia de esta planta en el pasado. Incluso una de sus comunidades se llama "El Maguey". En la actualidad, los principales cultivos son el maíz, frijol, maicillo, arroz, plátano, cocos y hortalizas. La pesca, la ganadería y el turismo, debido a sus hermosas playas y restaurantes, también son fuentes importantes de ingresos para los pobladores.
En marzo de 1935, la Hacienda Metalío fue adquirida por quien fue el Ministro de relaciones exteriores de El Salvador el señor Salvador Sol Millet por un valor aproximado de $11,023.81. La topografía de la hacienda es variada, con zonas planas y pendientes de hasta un 30% en tres cuartas partes del terreno. La altitud oscila entre los 95 metros sobre el nivel del mar (msnm), siendo el caserío Miramar el lugar más alto del cantón.

Don Salvador Sol Millet

Ministro de relaciones exteriores de El Salvador, Salvador Sol Millet
Metalío cuenta con tres reservorios de agua natural, conocidos como lagunas: Laguna del Mora en El Mora, Laguna La Flor (también conocida como Laguna de Las Mojarras) y Laguna Del Jocotal en El Jocotal. Estas lagunas son hábitat de diversas especies como la tilapia, guapote, caracol y chacalín sácate.

Laguna La Flor, Caserío Los Méndez "Las Mojarras"

Laguna El Jocotal

Laguna El Mora
La historia de Metalío nos relata la vida de una persona muy querida en la comunidad: la Señora María Argelia Landaverde, a quien cariñosamente llamaban "Niña Gelita." Durante 20 años, desempeñó un papel esencial como administradora en la Cooperativa de Usos Múltiples de Metalío, conocida como "La Tiendona."
En ese entonces, Metalío era un lugar en crecimiento. Don Goyo tenía el primer molino de maíz, y solo había una Oficina de Correo y ANTEL en la zona. Un punto interesante era el Palo de Guachimol, que estaba en la esquina de ANTEL y servía como lugar de descanso para aquellos que viajaban desde diferentes áreas para hacer compras en La Tiendona.
En ese contexto, la primera agencia en Metalío era propiedad de Don Venancio Morales y la Niña Menchita, marcando un momento importante en la comunidad.
Metalío tiene raíces profundas, y algunas de las primeras familias que llegaron al canton incluyen a los Morales, Ochoa, Franco, Durán, Lara y Bolaños. Su presencia y contribuciones fueron parte integral de la rica historia de este cantón.